El presidente de la Corte Constitucional, Jorge Enrique Ibáñez Najar, pidió este viernes en la 59ª Convención Bancaria en Cartagena que los bancos en Colombia sean más responsables con la sociedad y que el crédito educativo tenga una regulación especial. También defendió la autonomía del Banco de la República y dijo que el sistema financiero debe ayudar a mejorar la vida de todos los colombianos.
Ibáñez explicó que la actividad financiera no puede centrarse solo en números y tasas de interés. Señaló que la banca tiene sentido si ayuda a mejorar la vida de las personas, especialmente en un país con tantas desigualdades.
Afirmó que, aunque la mayoría de los bancos son privados, el servicio financiero es de interés público. Por eso debe cumplir con los principios de la Constitución de 1991: inclusión, transparencia, eficiencia y respeto por la dignidad humana.
El magistrado recordó que el Banco de la República debe tomar decisiones técnicas, sin presiones políticas. Sin embargo, explicó que esa autonomía debe usarse para cumplir los fines del Estado, como mejorar el bienestar general y proteger a los más pobres de la inflación.
Dijo que mantener el valor de la moneda no es solo un tema económico, sino también un derecho de los ciudadanos. Cuando suben los precios, quienes más sufren son los hogares más vulnerables.
Ibáñez aseguró que los bancos no deben funcionar como empresas cualquiera. Tienen la obligación de incluir a todos, y no dejar por fuera a quienes históricamente han estado excluidos del sistema financiero.
Resaltó que el ahorro debe ir acompañado de acceso al crédito. Esto ayudaría a acabar con préstamos informales como el “gota a gota”, que en muchos casos ponen en riesgo la vida e integridad de las personas. Una banca fuerte y solidaria, dijo, es la mejor forma de ofrecer crédito seguro.
Uno de los temas centrales de su discurso fue el llamado a crear reglas claras para el crédito educativo. Ibáñez señaló que, según el artículo 69 de la Constitución, el Estado debe facilitar mecanismos financieros para que todos puedan acceder a la universidad, sin importar sus ingresos.
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Dijo que no basta con ofrecer créditos públicos, como los del Icetex. Es necesario que el Congreso apruebe normas que permitan a los bancos ofrecer crédito educativo en buenas condiciones y con competencia, para que los estudiantes elijan la mejor opción y puedan terminar sus carreras sin obstáculos financieros.
En su mensaje final, Ibáñez defendió la importancia de las instituciones del país. Aseguró que la Constitución es el pacto que une a Colombia y que las instituciones deben actuar con responsabilidad para que no haya abusos de poder.
Advirtió que las democracias no se acaban de un momento a otro, sino poco a poco, cuando se dejan de respetar las normas. Por eso pidió a todos –autoridades, ciudadanos y sociedad civil– cuidar las reglas, respetar las leyes y fortalecer la convivencia pacífica.
Para cerrar, el presidente de la Corte afirmó que el sistema financiero es clave para el desarrollo del país. Dijo que los bancos ayudan a construir carreteras, puertos, aeropuertos y servicios públicos, y que su papel es fundamental para reducir la pobreza y cerrar las brechas sociales.
Pidió proteger al sistema financiero, pero también exigirle compromiso, transparencia y responsabilidad con la sociedad. “Una banca sólida y socialmente responsable”, concluyó, “es una apuesta por el futuro del país”.
(Colprensa)