El Ejército Nacional informó que en el municipio de Saravena, Arauca, tropas de la Décima Octava Brigada fueron atacadas el pasado 6 de enero por presuntos integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El ataque ocurrió en el sector conocido como La Y, El Consuelo, cuando las fuerzas militares adelantaban operaciones de protección para la población civil. El ataque, que involucró un artefacto explosivo, dejó como a dos soldados muertos y tres heridos, quienes fueron evacuados inmediatamente para recibir atención médica especializada.
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El Ejército identificó a los dos soldados asesinados como Carlos Andrés Marín Díaz y Manuel Alexander Benítez Rosado. Los tres heridos, cuyo nombre aún no ha sido revelado, fueron trasladados a un hospital para su atención. Las autoridades indicaron que las investigaciones para determinar los detalles del ataque y los autores materiales se encuentran en curso. En respuesta al atentado, unidades especiales fueron desplegadas al sector para reforzar la seguridad y dar con los responsables de la emboscada.
A través de un comunicado oficial, el Ejército expresó su pesar por la pérdida de los soldados y envió sus condolencias a las familias afectadas, asegurando que se les brindará un acompañamiento integral para enfrentar este difícil momento. Asimismo, rechazaron categóricamente el ataque, calificándolo como una violación de los derechos humanos y una infracción al derecho internacional humanitario. Además, denunciaron que este tipo de acciones pone en riesgo la seguridad de la población civil del sector.
#HonorYGloriaPorSiempre | Lamentamos informar que en el desarrollo de operaciones militares adelantadas para la protección de la población de Saravena, #Arauca, los soldados Carlos Andrés Marín Díaz y Manuel Alexander Benítez Rosado fueron asesinados, por una acción terrorista,… pic.twitter.com/CTMTdfUe0n
— Ejército Nacional de Colombia (@COL_EJERCITO) January 9, 2025
Este ataque se suma a otro incidente reciente en el departamento de Arauca: el secuestro de Ricardo Ramos, firmante del Acuerdo de Paz de 2016, junto con cinco miembros de su familia, ocurrido en la noche del 6 de enero en la vereda Caño Tigre, municipio de Arauquita. Según las autoridades, los secuestradores serían miembros del ELN. La comunidad alertó sobre el hecho, lo que permitió activar de inmediato un operativo conjunto entre el Gaula Militar de Arauca y el Gaula de la Policía Nacional.
El 8 de enero, el Ejército confirmó la liberación de Ricardo Ramos y las otras cinco personas secuestradas. En un emotivo mensaje, la Defensoría del Pueblo celebró su liberación, destacando que entre los liberados se encontraba un firmante de paz con discapacidad auditiva y su familia.
El Ejército Nacional condenó el secuestro, calificándolo como una grave vulneración de los derechos fundamentales a la vida y la libertad. Además, reiteró su compromiso con la seguridad de la población araucana y su disposición a seguir luchando contra el terrorismo y el crimen organizado en la región. Las autoridades expresaron su solidaridad con las familias de los secuestrados y afirmaron que continuarán desplegando esfuerzos para garantizar la seguridad en la zona.