Arthur Hanlon y la música latina; De niño, Quería ser un pianista clásico y viajar por el mundo interpretando las más grandes obras, hasta que a su ciudad llegó Carlos Santana, y en un solo concierto le cambió la vida a Arthur Hanlon.
Su amor por la música clásica continuaba intacto hasta el día de hoy, pero había algo en esos ritmos que interpretaba Santana, desde el rock, que le llamaba la atención, lo inquietaba y le generaba gran curiosidad.
Solo sería años más tarde, radicado en Nueva York para continuar con sus estudios superiores de piano, que se encontraría de frente con géneros musicales como la salsa, la bachata y el merengue, entre otros.
Eso le abrió un mundo musical diferente que quería explotar. Aunque al inicio muchos no entendieron su decisión, hoy en día lo aplauden por el gran aporte a la difusión de la música latina dentro de la comunidad anglo.
Ahora, radicado hace muchos años en Miami, emprendió un proyecto de largo aliento que llamó ‘2 Manos, 1 Mundo’, un trabajo discográfico de colaboraciones con artistas de distintas partes de América Latina, entre los que se encuentran los colombianos Goyo, Carlos Vives y Manuel Medrano.
Además, se destacan colaboraciones junto a artistas como Ángela Aguilar, Ana Bárbara, así como Yotuel, Darell y Tiago IORC. Un verdadero viaje por América Latina.
Poco a poco ha dado a conocer este álbum, que ha logrado impactar y destacarse dentro del saturado mercado musical con canciones como ‘Repetimos’ (junto a Yotuel y Darell) y en especial ‘Bala Perdida’ (con Ángela Aguilar).
“Es una de las mejores voces que he escuchado en mi vida y me permitió cumplir el sueño de intervenir un género musical mexicano como el huapango. Siempre pensé que con él se podía crear una gran canción pop, y de la mano de Ángela Aguilar lo logramos”, comentó Arthur Hanlon. ‘Bala Perdida’ se convirtió en fenómeno en redes sociales y funciona muy bien en radio.
‘Repetimos’, por su parte, se ha convertido en un himno internacional de Zumba, manteniéndose en el chart Tropical Airplay de Billboard por más de 14 semanas, un gran logro en la vertiginosa industria musical.
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“Son canciones hechas a la antigua, con mucho corazón. Fue un encuentro entre amigos, que nos tomamos el tiempo de hablar, crear juntos y hacer música real”, continuó el pianista.
En ‘2 Manos, 1 Mundo’ no hay límites, solo el deseo de hacer buena música entre amigos, como sucedió con Carlos Vives, viejo amigo, con quien compuso ‘Goodbye’.
Vives y Goyo se unieron a Hanlon en esta canción donde confluyen dos ríos: el Magdalena (Colombia) y el Mississippi (EE. UU.), donde se encuentran la cumbia y el blues.
Carlos le contó historias sobre la música de raíz de su propuesta musical, donde se entrelazan blues, cumbia, bossa nova y baladas conmovedoras. De ahí nació ‘Goodbye’.
Arthur Hanlon, pianista irlandés-estadounidense de Detroit, tiene una pasión innegable por la música latina. Su estilo fusiona el piano con el arte único de sus colaboradores.
“La gente siempre me pregunta cuál es mi mayor influencia. Mi respuesta: ¡Carlos Santana! Su sinergia musical me inspiró a crear algo fresco, inesperado e inolvidable”.
Este álbum le permitió cumplir sueños como ‘Egoísta’, una reunión con Ana Bárbara esperada por más de 20 años, y brilla en esta cumbia mexicana.
También incluye nuevas amistades, como en ‘Sol’, su segunda colaboración con Manuel Medrano tras ‘Luna’, ahora en una canción romántica y juguetona con toques de R&B.
Mientras lanza este disco, Arthur Hanlon ya planea el espectáculo con el que recorrerá Estados Unidos y América Latina, y que lo traerá a Colombia a finales de este año.
(Colrpensa)