José Pepé Mujica, presidente de su país entre el 1 de marzo de 2010 y el 1 de marzo de 2015 murió este martes en Montevideo, a los 89 años de edad, víctima de un cáncer que lo aquejaba desde hace meses.
Mujica, que en los años sesenta integró el Movimiento de Liberación Nacional – Tupamaros y, como consecuencia de eso estuvo preso durante la dictadura cívico militar que gobernó en ese país entre 1973-1985, se convirtió, ya como presidente, en una figura continental, que inspiró a muchas personas en el continente no solo por sus ideas políticas sino por sus pensamientos sobre la pobreza y la riqueza y cómo llevar una vida al margen del consumismo.
Hasta el final de su vida, vivió en una pequeña vivienda en Montevideo y se caracterizó siempre por renunciar siempre a todo tipo de protocolos y de lujos.
Cercano a la paz en Colombia
Mujica fue una figura clave en el proceso de paz en Colombia. Su mandato coincidió con el inicio de las negociaciones de paz con las FARC en Colombia, bajo el gobierno de Juan Manuel Santos, proceso del cual fue un inspirador y en el cual intervino, cuando fue necesario para darle su impulso.
Mujica fue un líder admirado por los políticos de izquierda del continente, en especial en Colombia, por el presidente Gustavo Petro, que meses antes de su muerte viajó a Montevideo para entregarle la Cruz de Boyacá.
(COLPRENSA)