La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ha aclarado que los recientes cambios en los giros de regalías no son un recorte, sino un ajuste necesario debido a que el gobierno nacional no logró alcanzar las expectativas de ingresos.
Arbey Avendaño Castrillón, gerente de Regalías de la ANH, destacó que esta situación se enmarca en el decreto 549 de 2024, el cual permite que las entidades territoriales aprueben proyectos por hasta el 80% de la apropiación bianual, liberando el 20% restante solo si demuestran eficiencia en la ejecución de sus planes de inversión.
Impacto del Ajuste en el Meta
Durante una sesión teleconferenciada de la Asamblea Departamental del Meta, Avendaño explicó que el departamento tuvo un desempeño inferior al 70% en la implementación de proyectos, lo que justificó la disminución en los giros de regalías. Este ajuste ha generado preocupaciones entre los líderes locales, quienes advierten sobre las consecuencias de esta medida en el desarrollo regional.
La gobernadora del Meta, Rafaela Cortés Zambrano, participó en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes, donde abogó por una distribución equitativa de las regalías para los territorios productores de hidrocarburos, enfatizando que es crucial asegurar que los recursos lleguen efectivamente a las comunidades que más los necesitan.
Controversia Política y reacciones Locales
Lea también:
La situación se complica aún más en el contexto de controversias políticas más amplias. El presidente Gustavo Petro ha enfrentado críticas por recortes drásticos en el presupuesto de regalías, que afectan especialmente a Meta y Casanare.
Según el concejal de Bogotá, Daniel Briceño, estas decisiones no son meramente técnicas, sino que responden a intereses políticos que amenazan la financiación de proyectos esenciales en ambas regiones. “Los habitantes de Meta y Casanare no deberían ser rehenes de las disputas políticas en Bogotá”, declaró Briceño en una rueda de prensa.
Los recortes han suscitado una fuerte reacción de la comunidad, que se ha organizado para exigir que se respeten sus derechos a las regalías.
“Es una injusticia que nuestras necesidades sean ignoradas”, expresó un líder comunitario, subrayando el impacto directo de estas decisiones en la calidad de vida de los ciudadanos.
El Futuro de los Proyectos en Riesgo
El impacto de estos ajustes es significativo en áreas críticas como salud, educación y transporte.
La reducción del presupuesto de regalías para Meta y Casanare no solo plantea interrogantes sobre la gestión de recursos públicos, sino que también se convierte en un punto focal de debate sobre la política territorial en Colombia.
La comunidad sigue unida por defender sus derechos, mientras el gobierno se enfrenta a la presión de responder a las demandas de las regiones afectadas.
Expectativas
En este contexto, el futuro de los proyectos esenciales para el bienestar de miles de ciudadanos pende de un hilo.
La respuesta del gobierno será determinante para evitar un agravamiento de la crisis regional, y el diálogo entre el gobierno central y las comunidades será crucial para buscar soluciones efectivas.