Las autoridades confirmaron este jueves que no hay sobrevivientes en el trágico accidente aéreo ocurrido la noche anterior en Washington D.C., cuando un helicóptero militar y un avión comercial colisionaron y se precipitaron a las gélidas aguas del río Potomac.
John Donnelly, jefe de bomberos y servicios de emergencia de la ciudad, anunció que la operación ha pasado de ser una búsqueda y rescate a una de recuperación de cuerpos. «En este momento no creemos que haya sobrevivientes. Hemos recuperado 27 personas del avión y una del helicóptero», señaló.
El accidente aéreo más grave en 24 años
La colisión ocurrió a las 20:48 hora local del miércoles, cuando un helicóptero Black Hawk del ejército estadounidense, con tres personas a bordo, y un avión comercial Bombardier CRJ700 de American Eagle, con 60 pasajeros y cuatro tripulantes, chocaron mientras la aeronave comercial se aproximaba a la pista 33 del aeropuerto Ronald Reagan (DCA).
Según el secretario de Transporte, Sean Duffy, la tragedia pudo haberse evitado. «El avión realizaba una aproximación normal, pero algo salió mal», indicó. La investigación sigue en curso para determinar las causas exactas del siniestro.
El fuselaje del avión fue encontrado en tres secciones distintas en aguas de poca profundidad. El helicóptero, que seguía un patrón de vuelo estándar, también se hundió en el Potomac.
Pasajeros de un equipo de patinaje entre las víctimas
La Federación de Patinaje Artístico de Estados Unidos confirmó que entre los pasajeros del vuelo 5342 de American Eagle se encontraban patinadores, entrenadores y familiares que regresaban de un campeonato en Wichita, Kansas.
La alcaldesa de Wichita, Lily Wu, expresó su solidaridad con las víctimas y aseguró que se están proporcionando recursos para sus familias. «Esta terrible tragedia unira para siempre a Washington D.C. y Wichita», declaró.
Investigación y reacciones
Un audio captado por el servicio LiveATC.net y divulgado por CNN reveló los momentos previos al choque. Un controlador de tráfico aéreo preguntó al helicóptero si tenía a la vista al avión comercial y le indicó que pasara por detrás. Segundos después, se escucharon jadeos y una exclamación en la torre de control al confirmarse la colisión.
El presidente estadounidense, Donald Trump, reaccionó en su red social Truth Social con críticas a la gestión del incidente. «La noche estaba clara, las luces del avión encendidas, ¿por qué el helicóptero no maniobró?», cuestionó.
Horas más tarde, en un comunicado más formal, Trump expresó condolencias a las familias de las víctimas y destacó el trabajo de los rescatistas. «Que Dios bendiga sus almas. Estamos monitoreando la situación», afirmó.
Las labores de recuperación continúan, con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) a cargo de la investigación para esclarecer los hechos de esta tragedia que ha conmocionado al país. EFE